DOI 10.35381/cm.v9i16.1030

 

Los títeres como herramienta pedagógica para el desarrollo de la inteligencia emocional

 

Puppets as a pedagogical tool for the development of emotional intelligence

 

 

Angélica Mirella León-Castro

angelica.leonc@ug.edu.ec

Universidad de Guayaquil, Guayaquil, Guayas

Ecuador

https://orcid.org/0000-0001-6528-1876

 

Zila Isabel Esteves-Fajardo

zila.estevesf@ug.edu.ec

Universidad de Guayaquil, Guayaquil, Guayas

Ecuador

https://orcid.org/0000-0002-2283-5370

 

Carlos Ernesto Valle-Navarro

carlos.vallen@ug.edu.ec

Universidad de Guayaquil, Guayaquil, Guayas

Ecuador

https://orcid.org/0000-0001-7870-1454

 

Mainer Gregorio Alcívar-Olvera

Mainer.alcivaro@ug.edu.ec

Universidad de Guayaquil, Guayaquil, Guayas

Ecuador

https://orcid.org/0000-0001-7960-5333

 

 

Recibido: 15 de septiembre 2022

Revisado: 10 de noviembre 2022

Aprobado: 15 de diciembre 2022

Publicado: 01 de enero 2023

 

 

 

RESUMEN

Es menester que a nivel educativo se implementen acciones estratégicas tendientes a fortalecer el sistema socioemocional de los niños desde las primeras etapas escolares. Pues, ello coadyuvaría al desarrollo de niveles de inteligencia emocional que les permita un mejor proceso integración, ya que la realidad ha afectado y modificado drásticamente el estilo de vida de toda la humanidad. Por consiguiente, se asume el articulo con el objetivo de describir a los títeres como herramienta pedagógica para el desarrollo de la inteligencia emocional. Metodológicamente responde a una investigación descriptiva de tipo documental y con diseño bibliográfico. En conclusión, Los títeres se constituyen en una potente herramienta terapéutica emocional desde tempranas edades, pues le permite al niño expresar sus ideas, sentimientos y hasta representar sus vivencias devenidas de su experiencia en la vida cotidiana, ayudándolo a darse cuenta de su realidad emocional y a comprender y solucionar sus conflictos de manera inteligente.

 

Descriptores: Pedagogía de títeres; herramienta pedagógica; inteligencia emocional. (Tesauro UNESCO).

 

 

 

ABSTRACT

It is necessary to implement strategic actions at the educational level to strengthen the socioemotional system of children from the early stages of school. This would contribute to the development of emotional intelligence levels that would allow them a better integration process, since reality has drastically affected and modified the lifestyle of all mankind. Therefore, the article is assumed with the objective of describing puppets as a pedagogical tool for the development of emotional intelligence. Methodologically, it responds to a descriptive research of documentary type and with bibliographic design. In conclusion, puppets are a powerful emotional therapeutic tool from an early age, since they allow children to express their ideas, feelings and even represent their experiences derived from their daily life, helping them to realize their emotional reality and to understand and solve their conflicts in an intelligent way.

 

Descriptors: Puppet pedagogy; pedagogical tool; emotional intelligence. (UNESCO Thesaurus).

 

 

 

 

INTRODUCCIÓN

Los últimos cinco años de esta década se han caracterizado no solo por drásticos cambios climáticos, conflictos bélicos, golpes militares en varias partes del mundo sino también por una pandemia mundial que obligó a replantearnos las relaciones humanas y laborales, al configurar una nueva realidad difícil de creer hasta hace pocos años atrás. Además de sacar a relucir el tema de los desórdenes y enfermedades mentales, así como estrés, fobias, trastornos psicológicos, entre otros, no solo en el ámbito laboral sino también en el socioeducativo.

En este contexto, la educación necesita docentes creativos y que no le tengan miedo a innovar, además de poseer la aptitud y capacidad para enfrentar con optimismo y gran compromiso social ambientes de aprendizajes mixtos, flexibles y abiertos en donde se potencia la creatividad, la reflexividad, la autovaloración y la criticidad.

Según el Instituto Nacional de Evaluación Educativa (INEVAL, 2018), la educación ecuatoriana ha sorteado diversos cambios que deben entenderse como la aplicación progresiva de un nuevo modelo de gestión, donde el sistema educativo constituye una garantía para alcanzar la igualdad e inclusión social de la generaciones futuras, al invertir el gasto público en forjar mecanismos que coadyuven a mejorar la cobertura y el acceso a los servicios públicos para disminuir las desigualdades socioeconómicas que históricamente se han mantenido en nuestra sociedad.

En este sentido, la Constitución de la República del Ecuador establece en su artículo 26 lo siguiente:

 

La educación es un derecho de las personas a lo largo de su vida y un deber ineludible e inexcusable del Estado. Constituye un área prioritaria de la política pública y de la inversión estatal, garantía de la igualdad e inclusión social y condición indispensable para el buen vivir. Las personas, las familias y la sociedad tienen el derecho y la responsabilidad de participar en el proceso educativo (Senplades, 2017, p.55).

Denotando con ello la universalidad y progresividad de la educación tanto como derecho humano y como deber estratégico del Estado, en donde el binomio familia y sociedad constituye un elemento importante para alcanzar las metas contenidas en los distintos planes en curso, para lo cual es necesario garantizar la igualdad de oportunidades para todo el colectivo. Por tanto, la educación es un derecho humano progresivo y está bajo la tutela del Estado la obligatoriedad de la adopción de medidas para la atención integral de la primera infancia, que permitan la cobertura y calidad de los servicios educativos al hacerlos cada vez más inclusivos.

Sin embargo, vale la pena recordar que debido a la pandemia mundial por el Covid19 se paralizó la actividad económica y social, aplicando medidas de confinamiento para restringir la movilidad y evitar la propagación de la enfermedad, lo cual significó un trastrocamiento de la realidad, trayendo consigo graves consecuencias en el ámbito psicosocial al potenciar situaciones de estrés prolongado en los individuos y de manera colectiva.

Según Sánchez (2021), el primer estudio sobre el impacto psicológico de la cuarentena en China durante el confinamiento, se tiene que dos de los factores que más afectaron el bienestar físico y psicológico de sus habitantes fueron la pérdida de hábitos y rutinas además del estrés psicosocial, por lo que algunos expertos apuntan a que las variables implicadas en el impacto psicológico son el miedo al contagio y la aparición de sentimientos de frustración y aburrimiento por no poder cubrir las necesidades básicas y presentar antecedentes de problemas de salud mental.

Para esta autora, citando a Abad (2020) y Sandín, Valiente, García y Chorot (2020), si bien es cierto que el impacto emocional puede incluir diferentes reacciones que pueden ser más o menos específicas, el conjunto de emociones negativas de miedo, ansiedad y preocupación suelen producirse de forma mixta en situaciones de elevado y prolongado estrés psicológico y ante amenazas de naturaleza impredecible e incontrolable; es decir, en situaciones de incertidumbre, la preocupación y el estrés pueden derivar en manifestaciones de ansiedad y depresión.

Hasta el momento, no son suficientes las evidencias sobre el impacto psicológico de la COVID-19 en la población general, pero estudios publicados principalmente acerca de la población china, valoran el impacto psicológico de la pandemia como significativo, ya que se experimentó y aún se mantienen síntomas depresivos, de ansiedad y estrés entre moderados y/o graves, así como una prevalencia de sintomatología de estrés postraumático aún en una gruesa parte de la población.

Ante este panorama nos encontramos con un grupo vulnerable de la población que clama especial atención y no son más que los niños y adolescentes, quienes padecen sus propios procesos y conflictos, aunque es innegable su vulnerabilidad, también lo es su capacidad de adaptación, asimilación, creatividad y resiliencia. En este tenor, Yaguana, Calvopiña, Espín y Romero (2021), refieren que producto del impacto de la pandemia de la Covid – 19, las manifestaciones psicológicas más frecuentes en niños, esta “la depresión con sentimientos de tristeza y abandono, la regresión emocional y conductual, el estrés, entre otros” (p.329).

Considerando lo expuesto, es menester que a nivel educativo se implementen acciones estratégicas tendientes a fortalecer el sistema socioemocional de los niños desde las primeras etapas escolares. Pues, ello coadyuvaría al desarrollo de niveles de inteligencia emocional que les permita un mejor proceso integración, ya que la realidad ha afectado y modificado drásticamente el estilo de vida de toda la humanidad.  Entonces habría que preguntarse ¿Qué es la inteligencia emocional? y por otro lado ¿Qué estrategias lúdico- pedagógicas podemos implementar en los ambientes educativos para fomentar la inteligencia emocional de nuestros educandos?

Considerando los cuestionamientos anteriores, se desarrolla el articulo con el objetivo de describir a los títeres como herramienta pedagógica para el desarrollo de la                         inteligencia emocional, pues, la reflexión apunta a que el abordaje y comprensión profunda de las primeras etapas del proceso educativo en nuestro país se deben incluir diferentes estrategias didácticas y pedagógicas que fomenten la creatividad, reflexividad, el trabajo en equipo y la criticidad, entre un sinfín de valores necesarios para la sana convivencia.

METODOLOGÍA

En este apartado se explica la metodología asumida para el desarrollo del proceso investigativo; en este sentido, se realizó bajo el paradigma positivista también llamado (cuantitativo, empírico-analítico y/o racionalista). Asimismo, responde a una investigación de tipo documental-bibliográfica, la cual según Suárez (2007, p.17), “es aquella búsqueda o indagación que se basa en la localización, registro, recuperación, análisis e interpretación de fuentes bibliográficas, hemerográficas, así como fuentes de carácter primario o inéditas”. Por consiguiente, las fuentes documentales como artículos científicos de revistas arbitradas, libros, entre otros escritos, se constituyeron en unidades de análisis, permitiendo con ello, ahondar en el objeto de estudio.

 

PRESENTACIÓN Y DISCUSIÓN DE RESULTADOS

La inteligencia emocional: conceptualizaciones e implicaciones

El concepto de Inteligencia Emocional es elemento indispensable para el desarrollo psicosocial y educativo de los individuos. Por consiguiente, podemos decir que la Inteligencia Emocional se refiere a la capacidad de los individuos para utilizar la emoción (individual o colectiva) de manera proactiva, tanto a nivel consciente o subconsciente; es decir, como herramienta para mejorar el razonamiento y la toma de decisiones en distintos ámbitos.

Cabe destacar que Daniel Goleman (1995- actualidad), es el máximo exponente sobre el tema, para lo cual relaciona las cualidades de la inteligencia emocional y el liderazgo, argumentando que el éxito en esta área no depende exclusivamente de las competencias prácticas e intelectuales que se posea, sino más bien de la capacidad de incidir de manera positiva en un grupo de personas. Por tanto, desde lo expresado por Fragozzo, (2015), identifica cuatro dimensiones esenciales asumidas como capacidad de: autoconocimiento emocional (conciencia de sí mismo), autorregulación (control de sí mismo), relaciones interpersonales (conciencia social) y regulación de las relaciones interpersonales (control de las relaciones sociales).

Considerando lo anterior, se trae a colación lo expresado por Navarro (2015), en relacion a que la Inteligencia Emocional puede dividirse en dos áreas y cuatro grandes bloques: El área intrapersonal donde encontramos el autoconocimiento y la autorregulación de las emociones y el área interpersonal donde podemos situar la empatía y las habilidades sociales; asimismo señala que algunos autores añaden al área intrapersonal la capacidad de auto motivarse y adaptarse al cambio (ver Figura 1).

https://habilidadsocial.com/wp-content/uploads/2015/05/Inteligencia-emocional.png
 

 


 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Figura 1.  Áreas de la Inteligencia emocional.

Fuente: Navarro (2015).

 

 

En el ámbito educativo, el concepto de inteligencia emocional se ha empleado como parte fundamental dentro de los procesos de enseñanza - aprendizaje durante la infancia (Guil et al., 2018), ya que atañe al desarrollo psicosocial y propone cuestionar, como ya se expresó,  la pre-concepción sobre inteligencia que la relaciona mayormente con pruebas e índices de coeficientes intelectuales y altos niveles de intelectualidad, contrario a la inteligencia emocional, en donde se utilizan como indicadores ciertas habilidades como: empatía, motivación, autoconciencia, la capacidad de controlar la exteriorización de las emociones y el liderazgo (ver Figura 2)

 

 

 

 

 

 

 


 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Figura 2. Indicadores para medir la inteligencia emocional según Goleman.

Fuente: Fragozzo, (2015).

 

Por otro lado, ha permitido resignificar las emociones tanto individuales como colectivas, en contraposición a los otros pares, con el fin de manejar pensamiento y conducta de manera efectiva, por lo que en el ámbito educativo se ha constituido como una dimensión primordial para el aprendizaje y la coexistencia humana (Mujica, Carter y Casanova, 2021), producto de su carácter permanente y continúo, para lo cual se necesitan desarrollar estrategias adecuadas, sobre todo para las primeras etapas escolares que es fundamental .

 

Los Títeres como estrategia lúdico pedagógica para fomentar la inteligencia emocional de nuestros educandos.

Los Títeres y sus orígenes

Para Keus (2018), lingüísticamente la palabra títere es de origen desconocido, pero se considera que su etimología presenta un origen onomatopéyico; es decir, es una figura retórica que consiste en la representación escrita de un sonido natural. Por otro lado, Baird (1965) citado por Oltra (2014), define el títere como una figura inanimada que se mueve mediante el esfuerzo humano delante un público; es decir, es una figura caracterizada que gracias a la manipulación humana cobra vida al ser parte de una historia contada muchas veces en un espectáculo.

Al respecto, Oltra (2014), señala que existen estudios de especialistas en perspectiva antropológica como Badiou (2009), que plantean una seria discusión sobre la profesionalización del trabajo de la mayoría de los titiriteros y le asignan la categoría de disciplina artística autónoma (p.36), por lo tanto, consideran el objeto plástico y el movimiento como dos de las características definitorias del teatro con títeres, y que constituyen los fundamentos de esta disciplina artística (Oltra, 2014).

En concordancia con lo expuesto, podemos afirmar que los títeres han existido desde la antigüedad, ya que expresa Mesas (2015):

Si indagamos en el origen de las primeras marionetas y títeres encontrados, descubrimos que estos surgieron para una función más conectada con la espiritualidad y salud de lo que creemos. Los primeros títeres no tenían un carácter teatral, lúdico o pedagógico como se reconoce en la actualidad, si no que formaban parte de las primeras ceremonias mágicos-religiosas que se conocen (p.301).

Por tanto, nacieron para jugar con las sombras o lo que actualmente conocemos como Teatro de Sombras y se han encontrado vestigios en el mundo entero que denotan que primeramente fueron hecho de la piel de los animales capturados y/o madera hasta evolucionar a los materiales actuales como el plástico; en este sentido, el fin siempre ha sido el mismo, lograr la interacción humana, contar una historia, entretener y mediante moralejas, educar en valores y ciudadanía.

Es por ello que se considera que el títere es anterior al teatro de los chinos y griegos antiguos, siendo relacionado con figuras y relatos religiosos, en donde confluyen los dioses, héroes o heroínas contando las hazañas de reyes y sus dinastías. Actualmente según Keus (2018), existen varios tipos, los de guante, sombra y dedal y se diferencian de las marionetas puesto que estas son manipuladas a través de hilos, que son operados por uno o varios individuos.

Ahora bien, en el contexto de asumir a los títeres como estrategia lúdico pedagógica para fomentar la inteligencia emocional de nuestros educandos, el mismo Oltra (2014), señala que diversos autores como García del Toro (1995), Astell–Burt (2002) y Tillería (2003), proponen, desde una perspectiva fundamentada en Vigotski y Rodari, variadas clasificaciones de los títeres en función de su elaboración y manipulación, ya que la expresión libre constituye la base de la creatividad, por lo que coinciden en afirmar que se hacen cada vez más necesaria la formulación y puesta en práctica dentro de los ambientes de aprendizaje diversas actividades teatrales interdisciplinarias como estrategias pedagógicas.

En este sentido, propone que los títeres más apropiados para la escuela son los manipulados desde abajo y sobre todo los de palo, los de calcetín y el guiñol. Por consiguiente, su incorporación a la praxis docente resulta una estrategia didáctica atemporal, que no pasa de moda, no solo por la economía en cuanto a los recursos empleados, más allá de los materiales utilizados para su elaboración, así como el recurso literario a aplicar.

 

Los Títeres como estrategia para la inteligencia emocional 

Mesas (2015) señala que la psicoanalista suiza Madeleine Rambert (1900 - 1979), comenzó a practicar el psicoanálisis de niños en el período de entreguerras y en 1930, sería una de las primeras científicas en introducir los títeres en la terapia con infantes, siguiendo los lineamientos de la psicoterapéutica Anna Freud (1895 - 1985), hija menor de Sigmund Freud, reconocido como el padre del psicoanálisis, quien se destacó por sus contribuciones al psicoanálisis infantil y al estudio de los mecanismos de defensa, pieza clave en la teoría psicoanalítica. Su obra más conocida se denomina “El yo y los mecanismos de defensa” (1936) también contribuyó en fundar la publicación anual del Estudio Psicoanalítico del niño en 1945.

Esta autora consideraba que la práctica y teoría psicoanalítica podía influir de manera significativa en los primeros años de vida de los individuos, ya que es cuando se interiorizan las normas sociales y pueden quedar fijados los diversos traumas y fobias que serían determinantes la configuración del adulto, para ello publica un libro denominado Introducción al Psicoanálisis para Educadores (1948).

En este mismo tenor, Rambert propone el juego de los guiñoles o marionetas como una nueva técnica en el psicoanálisis infantil, la cual consistía en invitar al infante a imaginar historias para después representarlas con marionetas, ya que según concluye la propia autora en su artículo “Una novela técnica de psicoanálisis infantil: El juego de guiñoles” (1938), la marioneta se convierte en un medio de transferencia que facilita la expresión de los sentimientos inconscientes del niño que juega. Dicha técnica también se conoce como "teatro de títeres reflexivo" y es un recurso dentro de la terapia familiar sistémica, una de las ramas de la psicología que mayor auge ha alcanzado en los últimos tiempos y puede usarse en tratamientos de arte terapia o drama terapia.

Asimismo, Mesas (2015), señala una variedad de autores y experiencias sobre el tema, haciendo mención especial a la psicoanalista Françoise Dolto, quien en 1949 comenzó a introducir una técnica de juego mediado en su terapia con niños a través de un objeto, en este caso una muñeca llamada Flor, en su obra “El juego del deseo” de 1981. La autora observó diversos dibujos de niñas dentro de su estudio de casos en los cuales interpretó los símbolos a través de un detallado registro, lo cual arrojó un hilo conector con sus pacientes, por lo que al construir una muñeca-flor, ésta se convirtió en el objeto mediador de sus terapias, ya que brindaría las condiciones adecuadas de distanciamiento y reflexión, que permiten al sujeto la expresión de las emociones (Dolto, 1981, en Mesas 2015).

En la segunda mitad del siglo XX aumentaros los estudios y experiencias relacionados con las prácticas de los títeres en la salud, sobre todo en hospitales psiquiátricos por lo que Fernández (1995), citado en Mesas (2015), afirma “lo curativo está en la capacidad de los títeres para conectarnos con cualidades que hemos perdido de vista, y desde esta recuperación, llevarnos de la mano por los caminos de lo humano, lo simple, el asombro y la risa”.

Hoy por hoy, los títeres se constituyen, en las primeras etapas escolares, en una poderosa manera que se tiene de desarrollar aprendizaje a partir de situaciones de interacción social (Szulkin y Amado, 1973; citado por Oltra, 2013). Con ella se estimula la fantasía e imaginación y consecuentemente sus habilidades, inteligencia, aptitudes, lenguaje, entre otros, facilitando la sociabilidad del niño en su entorno (Solé, 2006; referenciado por Pablo, 2018).

Siendo, entonces, una real herramienta terapéutica emocional que permite el fortalecimiento de los vínculos, al darle voz a los más tímidos, construir caminos hacia la calidad de las relaciones y posibilitar que el niño como sujeto pueda exteriorizar su mundo interior expresando sus emociones y sentimientos importantes como celos, enojo, pérdida, soledad, entre otros; ayudándolo a darse cuenta de su realidad emocional y a comprender y solucionar sus conflictos de manera inteligente.

Para finalizar, no cabe la menor duda de que las actividades que involucran la elaboración, manejo y observación de títeres como en el arte - terapia permite la interdisciplinaridad con otras terapias creativas, tales como el psicodrama y la terapia con la voz desde la representación o el juego con títeres, la musicoterapia desde la elaboración de acompañamientos a la representación y la terapia corporal en cuanto a la utilización del títere como una prolongación del propio cuerpo. (Mesas, 2015, p.306).

 

CONCLUSIONES

Los títeres son un recurso ideal que permite captar la atención de los más pequeños. A través de estos, el niño puede expresar sus ideas, sentimientos y hasta sus representar sus vivencias devenidas de su experiencia en la vida cotidiana. Asimismo, como herramienta pedagógico didáctica favorece la comunicación y la escucha entre los sujetos educativos, coadyuvando a la resolución de conflictos y necesidades, al mismo tiempo que desarrollan el lenguaje, la sociabilidad, la emocionalidad, el pensamiento crítico, la capacidad de reflexionar; constituyéndose de esta manera, en estrategia ideal para desarrollar la inteligencia emocional desde tempranas edades.

Por consiguiente, resulta vital que los docentes se apropien del uso del títere como herramienta, no obstante, deben conocer todas lo que ello implica, desde lo más elemental como lo es su conceptualización, historia, tipologías y usos pedagógicos, hasta como construir el texto dramático apropiado y su objetivo didáctico, si aspira a desarrollar integralmente todo el potencial del niño dentro del ambiente de aprendizaje.

FINANCIAMIENTO

No monetario.

 

AGRADECIMIENTO

A todos los colaboradores que formaron parte de esta investigación.

 

REFERENCIAS CONSULTADAS

 

Fragoso, R. (2015). Inteligencia emocional y competencias emocionales en educación superior, ¿un mismo concepto? [Emotional intelligence and emotional competencies in higher education, the same concept?]. Revista Iberoamericana de Educación Superior, 6(16), 110-125 Recuperado de https://www.redalyc.org/pdf/2991/299138522006.pdf

 

Guil, R., et al. (2018). Desarrollo de la inteligencia emocional en la primera infancia: una guía para la intervención. [Development of emotional intelligence in early childhood: a guide for intervention]. Universitas Psychologica, 17(4), 1–12. https://doi.org/10.11144/Javeriana.upsy17-4.diep

 

Instituto Nacional de Evaluación Educativa (2018). La educación en Ecuador: logros alcanzados y nuevos desafíos. Resultados Educativos 2017-2018. [Education in Ecuador: achievements and new challenges. Educational results 2017-2018]. Recuperado de https://acortar.link/Yl1TQc

 

Keus, D. (2018). Diferencia entre Títeres y Marionetas. [Difference between Puppets and Marionettes]. [Mensaje en Blog]. Disponible en: https://n9.cl/qdo87

 

Mesas, E. (2015). El títere como herramienta de trabajo en arteterapia. [The puppet as a working tool in art therapy]. Arteterapia - Papeles de arteterapia y educación artística para la inclusión. 10, 301-317. https://doi.org/10.5209/rev_ARTE.2015.v10.51698

 

Navarro, P. (2015). Habilidad social. [Social skills]. [Mensaje en Blog]. Disponible en: https://habilidadsocial.com/test-de-inteligencia-emocional/

 

 

 

 

 

Oltra, M. (2014). El títere como objeto educativo: propuestas de definición y tipologías. [The puppet as an educational object: definition proposals and typologies]. Espacios en Blanco. Serie indagaciones, (255), 277-292 Recuperado de https://acortar.link/pRaabv

 

Oltra, M. (2013). Los títeres: una herramienta para la escuela del siglo XXI. [Puppets: a tool for the school of the 21st century]. Espacios en Blanco. Revista española de pedagogía, 24(1) Recuperado de https://revistadepedagogia.org/wp-content/uploads/2013/05/255-06.pdf

 

Pablo, Z. (2018). Jugando con los títeres mejoro mis habilidades comunicativas. [Playing with puppets improves my communication skills]. [Tesis de Grado]. Pontificia Universidad Católica del Perú, Lima: Perú. Recuperado de https://acortar.link/IFNqpE

 

Sánchez, I. (2021). Impacto psicológico de la COVID-19 en niños y adolescentes. [Psychological impact of COVID-19 in children and adolescents]. MEDISAN, 25(1), 123-141.  Disponible en: https://acortar.link/ZE8ldh

 

Senplades (2017a) Plan Nacional de Desarrollo 2017-2021. Toda una vida. [National Development Plan 2017-2021. A Lifetime]. Recuperado de https://acortar.link/qccmeX

 

Suárez, N. (2007). La investigación documental paso a paso. [Documentary research step by step]. Universidad de los Andes. Consejo de Publicaciones. Recuperado de: https://acortar.link/fSgdTW

 

Yaguana, Y., Calvopiña, L., Espín, M. y Romero, J. (2021). Impacto psicológico de la Covid-19 en niños y su entorno familiar. [Psychological impact of Covid-19 on children and their family environment].  RECIMUNDO: Revista Científica de la Investigación y el Conocimiento, 5(4), 323-331. Recuperado de https://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=8289211

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

©2023 por los autores. Este artículo es de acceso abierto y distribuido según los términos y condiciones de la licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-CompartirIgual 4.0 Internacional (CC BY-NC-SA 4.0) (https://creativecommons.org/licenses/by-nc-sa/4.0/